Los seres humanos podremos tener las mejores intenciones, los mejores conocimientos, las mejores bases académicas y los mejores recursos, pero siempre seremos unos salvajes ignorantes si no aprendemos y controlamos algo que desde que nacemos está muy ligado a nosotros, el mal genio y el orgullo, quien no controle estas dos sensaciones en su vida terminara corrompido por las mismas aún si tiene vastos conocimientos o recursos.
Cuando caemos en el mal genio esto solamente nos enferma perjudicando seriamente nuestra salud, además de que al final de cuentas el mal genio no soluciona nada, si tenemos un problema angustiarnos o estando de mal genio no lo solucionaremos, en esos momentos hay que tratar de tener la cabeza fría para hallar soluciones, pues el mal humor lo único que hace es aumentar nuestros problemas.
Al igual que el mal genio el orgullo también acaba con todo, las personas que en extremo son orgullosas terminan fracasando, su orgullo solo los adentra en más problemas, problemas que muchas veces con solo un acto de humildad pueden perder importancia, pero que al girar en torno al orgullo solamente creen mas y mas, el orgullo vuelve ciegas a las personas, no solo las hace ignorantes, también genera que otras personas no quieran darles la mano cuando estas las necesiten.
Para la vida de toda personal es fundamental evitar el mal genio y el orgullo, esto acaba con todo lo bueno de cualquier ser, nunca se toman buenas decisiones cuando hay mal genio y orgullo de por medio, a nivel social la armonía que se necesita en una comunidad se va al piso con el mal genio y el orgullo, muchos de los más serios problemas que vive una sociedad muchas veces fueron causados por que una persona no pudo controlar su mal genio o su orgullo.
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