El ser humano por naturaleza es un ser muy territorial, un ser en pro de guerra, y esto al final de cuentas tiene mucho de bueno, puesto que el ser que no este dispuesto a pelear por lo que quiere sencillamente no lo merece; Sin embardo una cosa es pelear por una causa que lo merite y otra es pelear por algo sin importancia alguna, esto ultimo pasa cuando se pelea por un simple diferencia de opinión o el hablar sin cortesía.
Estamos en un mundo en donde es mas fácil hacer conflictos que generar unión por alguna causa, por ello aprender el arte de ser cordial sera muy útil para evitar en un alto grado conflictos, sin embargo hoy muchas personas confunden lo que es cortesía con decir si a todo o tratar de caerle bien a todo el mundo, esto sin duda alguna es un grave error puesto que el que dice si a todo siempre termina realizando cosas que no desea hacer, termina haciendo lo que hace de mala gana y queda mal muy fácilmente.
Pretender decir que Si por creer que eso es cortesía o por querer caerle bien a todos, es un error, la cortesía es saber decir las cosas de forma respetuosa, mas no tener que decirle Si a cualquier persona, un Si o un No tiene mucho poder en cuanto a la forma que toman nuestra vidas, ademas la mayoría de las personas que se molestan con que les digan un No en una de sus peticiones son quienes mas se niegan a realizar un favor o a decirle Si a otros, si alguien espera siempre que voz le digas que Si a todo en el fondo esa persona es egoísta pues no tiene en cuenta la situación de la otra persona si no la de el solamente.
Aprender a decir que No y ser cortes a la vez es un arte que todo ser debe aprender, un arte que puede evitar conflictos que no valen la pena y que también puede ahórranos el comprometernos con cosas que no deseamos realizar, estamos en un mundo donde se hacen conflictos con cualquier comentario por lo cual en esta sociedad debemos procurar no seguir esa senda, pero a la vez debemos ser conscientes de que jamas nadie le caerá bien a todo el mundo y por lo tanto, no podemos esperar que sean siempre corteses con nosotros, por lo cual solo nos queda eludir en lo posible a quienes hablan con agresividad pues pelear con estas personas es una perdida de tiempo pues casi siempre son fanáticas; El decir No es liberador, este acto no debe generar culpa alguna, pues nuestro ser necesita estar bien con sigo mismo antes que tratar de agradar a otros.
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