Los Ex-Presidentes y la Carcel

En la actualidad en toda Latinoamérica muchos ex presidentes de la región tienen problemas judiciales, en muchos casos estos ex mandatarios han ido a la cárcel, solamente en los países más corruptos aquellos ex mandatarios que tienen asuntos pendientes con la justicia están impunes, como es el caso de Venezuela o Colombia, aunque nuestra región en comparación a China, Irán, Suiza, entre otras naciones, está muy atrasada en términos de efectividad de la justicia, podemos ver que hay avances, hace años nunca nos hubiéramos imaginado que un ex presidente podría ir preso en nuestra región, hoy Perú, Argentina, Brasil, Panamá entre otros países han logrado hacer esto con personas que antes hubieran sido vistas como Intocables, lo que demuestra que nuestra región está avanzando en materia de justicia.

Es preocupante que casi todos los presidentes de la región tengan líos judiciales, pero siento honestos desde siempre casi todos los mandatarios que hemos tenido han sido unos corruptos vende patria, estamos en una sociedad en la que la justicia parece mandar más mensajes en pro de una impunidad total a uno en pro del dicho "el que la hace la paga", por lo tanto el acto de mandar a la cárcel a una persona que fue la encargada de liderar la economía de todo un país, por actuar mal es un buen mensaje, un mensaje que dice que después de todo ¡si cometes delito no importa quien seas iras preso!

Lo ideal no sería echar a todo ex presidente saliente a prisión, ojala todos los presidentes de nuestros respectivos países fueran personas honorables, pero lo cierto es que es todo lo contrario, ojala mejore nuestro sistema judicial para que así esos grandes líderes que con su mala gestión arruinaron pueblos enteros, paguen sus malos actos y para que con ello se mande un claro mensaje a futuros presidentes de que si actúan mal tendrán que pagar las consecuencias; Colombia y México particularmente están llenos de malos presidentes, casi todos merecen la cárcel, ojala estos dos países puedan vencer la corrupción y la presión de la delincuencia para que así algún día se pueda ver presos a antiguos presidentes que solo han desangrado estos países.