Muchos dicen que Arvaro Uribe, Rafael Correa, Hugo Chavez, Lula da Silva entre otros son los mejores gobernantes de sus países en lo que va del siglo XXI, quizá todo ellos tuvieron uno que otro acierto en sus gestiones, pero lo que muchos no tienen en cuenta es que estas personas gobernaron en periodos de relativa prosperidad en la región y con la gran ventaja de que en el momento en que gobernaron las materias primas como el Petroleo tenían altos valores nunca antes vistos en el mercado.
En los tiempos en que gobernaron Rafael Correa y Alvaro Uribe, al ser Colombia y Ecuador dos países petroleros, ambas repúblicas se beneficiaron bastante de que un barril de petroleo valiera mas de 100 dolares, lo que le permitió a ambos gobernantes ejecutar la gran mayoría de sus proyectos sin preocuparse por recursos, ellos no son los grandes lideres que las personas creen simplemente estuvieron favorecidos en el momento en que fueron presidentes.
Volviendo a los dos ejemplos anteriores si bien hay que reconocer el desarrollo de la infraestructura ecuatoriana con Correa y la seguridad democrática con Uribe en Colombia, se puede decir que a largo plazo estos dos presidentes junto con muchos gobernantes latinoamericanos de la época fueron malos gobernantes, pues en su momento ellos volvieron a sus países a la dependientes de los recursos naturales y en lugar de industrializar y tecnificar su industria los hicieron vulnerables a tiempos en los cuales las materias primas poco valen (tal como esta pasando hoy actualmente).
Ningún gobernante latinoamericano de la década pasada fue visionario, ninguno aprovecho en su momento el alto costo de las materias primas para desarrollar a su país, ninguno aprovecho los altos ingresos para mejorar la educación, la ciencia, el campo y la calidad de vida de su pueblo, en lugar de eso endeudaron a sus países, permitieron que la corrupción robara miles de recursos, dejaron a sus países vulnerables a la crisis actual y dependientes a potencias extranjeras.
No importa si los gobernantes de la década pasada eran de derecha o izquierda, todos ellos fueron unos malos administradores, ninguno merece ser un ejemplo positivo para las futuras generaciones, solo tuvieron suerte en su momento y no la supieron aprovechar para el beneficio de su país solo la usaron para hacerse ver como los mesías de sus respectivos pueblos.
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